Tanto si trabajas por cuenta propia como ajena, el tiempo es de vital importancia para poder realizar todas las tareas que quieres terminar al cabo del día. Pero, sin duda alguna, en el caso de los autónomos es mucho más importante. Y no hay que olvidar que el reloj siempre juega en contra. En Translation-Traducción tenemos varias ideas para ayudar a gestionar el tiempo de los autónomos. Se trata de consejos orientados principalmente a los traductores, pero se pueden aplicar a cualquier otro sector.
Horario de trabajo
Muchos traductores trabajan desde casa y se marcan su propio horario. Esto puede ser un peligro porque la cama, la televisión y la nevera están muy cerca. La clave está en obligarse a llevar un ritmo laboral como si se estuviera en una oficina. No hay excusas. Así que no remolonees con el despertador y fuérzate a «fichar» para entrar al trabajo y así podrás «salir» a una hora prudente. Las traducciones te están esperando.
Optimiza el tiempo
Elige los recursos de traducción que consideres más relevantes, elabora glosarios terminológicos para encontrar rápidamente la traducción de tus textos, recurre a los programas de traducción asistida, organiza tus documentos de traducción para encontrarlos enseguida… El tiempo es oro. No lo pierdas si puedes hacer las tareas más rápido.
Encargos
No digas que sí a cualquier encargo. Quizá no puedas hacer frente a alguna traducción por problemas de tiempo, o incluso porque no estés lo suficientemente preparado. A veces es mejor rechazar una traducción que decir que sí y entregarla mal y con prisas. De este modo quedarías fatal con el cliente, y el boca a boca te dará un revés muy duro. Se trataría de un daño que luego te costaría mucho tiempo subsanar.
Descansos
Al igual que te recomendamos que tienes que trabajar y marcarte un horario, también te decimos que debes descansar. Los descansos son necesarios para despejar la mente y volver a traducir con las pilas puestas. Lo ideal sería trabajar 8 horas de lunes a viernes, pero como somos conscientes de la cruda realidad de los traductores, al menos intenta tener tus fines de semana y no abusar de las horas de trabajo. Dedícate tiempo a ti mismo durante el día y, mientras trabajas, haz descansos de unos minutos para despejarte.
Clientes
¿Cuántos clientes tienes? Y, sobre todo, ¿cuánta carga de trabajo te suelen enviar y con qué frecuencia? Debes tenerlo muy en cuenta a la hora de organizarte y no verte desbordado. O justo lo contrario, lo cual debería replantearte buscar nuevos clientes que te envíen traducciones o traducciones juradas con cierta frecuencia.
Diversificación
Diversifica las tareas. No hagas siempre lo mismo. También te recomendamos empezar con la fase de prueba-error para saber qué te compensa más en relación tiempo-dinero y así promocionar los servicios que te den un beneficio más amplio.
Formación
La formación es una forma muy productiva de invertir el tiempo. Gestionar un programa de traducción, revisar correctamente un texto en español, aprender un idioma nuevo… Recurre a la formación especialmente en momentos de baja cantidad de trabajo y cuando tengas mucha carga de traducciones notarás los resultados.
Tareas
Estaría bien que te marcases un tiempo para cada tarea, así no se te irá el santo al cielo ni dejarás nada pendiente para el día siguiente. Redacción de artículos para el blog, mejoras en la web, búsqueda de nuevos clientes, traducciones juradas…
Distracciones
Deja de lado las redes sociales y el teléfono para asuntos personales mientras trabajas. Si te cuesta resistir la tentación, existen algunos programas para el ordenador y aplicaciones para el móvil que ayudarán con bloqueos a ciertas páginas u otros programas durante un tiempo determinado.
Si eres traductor autónomo, te invitamos a compartir tus consejos y experiencias con Translation-Traducción. El objetivo es que cada traducción se entregue bien y a tiempo; eso sí, dedicándole tan solo el tiempo necesario a cada encargo. Así lograrás la mejor rentabilidad. El tiempo es oro.
Crédito de la imagen: lagranlucha.com
FO