Si quieres presentar una buena traducción, es importante que no cometas una serie de errores. Seguramente ya te lo hayan explicado en la carrera de Traducción e Interpretación, pero no está de más hacer un pequeño recordatorio para refrescar y entregar a tu cliente una buen traducción.
¿Quién es Tomás Crucero o Jorge Arbustos?
La traducción automática, aunque vaya de colega, suele ser un mal aliado para los traductores; o al menos no es de fiar del todo. Muchas veces se cometen errores por culpa de traducciones literales. El caso de los nombres de personas es bastante habitual. En ocasiones Google u otros programas de traducción automática traducen las palabras literalmente. Por eso, se ven casos en los que Tom Cruise es Tomás Crucero; George Bush, Jorge Arbustos; Steve Jobs, Esteban Trabajos; o Mike Oldfield, Miguel Campoviejo. Al margen de estos ejemplos de traducción en inglés, hace tiempo hubo un caso famoso con una publicación en un periódico que se tradujo de castellano a catalán dejando el nombre de Leo Messi como Llegeixo Messi. La primera persona de singular, del presente de indicativo del verbo llegir, leer, es llegeixo. De ahí el fallo y las consecuentes críticas.
La naturalidad es lo natural
Si una frase suena forzada… algo falla. Tienes que buscar la naturalidad del lenguaje en todo momento, que no chirríe nada al leerla. A veces la sencillez es lo mejor para obtener una buena traducción. Si se te atasca algo, quizá lo mejor sea dejarlo reposar un rato (o un día, si tienes margen de entrega para tu traducción) y verlo con más claridad en otro momento.
Los falsos amigos son verdaderos enemigos
Sucede en todos los idiomas. En Translation-Traducción ya hemos publicado algunos ejemplos de estos errores de traducción por culpa los false friends. Si quieres presentar una buena traducción, presta atención a los falsos amigos para no cometer errores de significado.
Dobles sentidos y juegos de palabras
Estos sueles ser algunos de los principales obstáculos a los que se debe hacer frente para lograr una buena traducción. Los chistes, los dobles sentidos, los idioms, los juegos de palabras… son auténticos retos. Una máquina o un programa de traducción automática nunca logrará alcanzar este nivel, por lo que el papel de un traductor siempre será vital. O al menos la presencia de un buen revisor o corrector de textos.
Adáptate a las adaptaciones culturales
Valga la redundancia, pero es algo que debes hacer sí o sí. Por ejemplo, en chino mandarín el número 8 tiene una fonética similar a la palabra «prosperidad» y el número 4 al término «muerte». Por tanto, y solo siempre que sea posible, deberías evitar uno de estos números y potenciar el otro según el contexto. En este artículo sobre traducción audiovisual hay una explicación más detallada sobre las adaptaciones culturales para conseguir una buena traducción.
Las equivalencias académicas
Esto es bastante habitual en la traducción jurada. El sistema de calificación no es igual en todos los países: sobresalientes en España, B+ en Estados Unidos… Y las titulaciones tampoco. Por ejemplo, en Reino Unido puedes obtener un Bachelor Honours Degre, mientras que en España aspirarías a un título de Grado. ¿Qué hacer en estos casos para lograr una buena traducción jurada u oficial? Las notas explicativas suelen ser muy socorridas, así como una recomendación muy profesional.
¿Eres traductor jurado, o no jurado, y quieres añadir algún aspecto más para revisar de cara a una buena traducción? En Translation-Traducción estamos encantados de conectar ideas para ayudar a otros traductores.
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